El gobierno comunal de Santa Rosa de Calchines, recuerda que está prohibido la venta de alcohol a menores de 18 años.
“Los adultos responsables, las instituciones estatales de cualquier jurisdicción, las empresas del sector turístico y del entretenimiento y los fabricantes y comercializadores de bebidas alcohólicas debemos velar por el cuidado de los niños, jóvenes y adolescentes ante la ingesta nociva de ese tipo de productos” recordó el Pte. comunal Carlos Kaufmann.
El consumo de alcohol es uno de los principales factores de riesgo prevenibles de las enfermedades no transmisibles (cardio y cerebro vasculares, trastornos metabólicos, etc). Es el 5,9% de las muertes en el mundo y el 5,1% de la carga de enfermedades y lesiones fueron atribuibles al consumo nocivo de alcohol. Esta es la principal causa de muerte en la población de entre 15 y 49 años.
El consumo de alcohol se asocia también a muertes y discapacidad por accidentes de tránsito -entre el 20% y el 50% de las muertes por accidentes de tránsito están asociadas al alcohol-, lesiones intencionales y no intencionales, violencia interpersonal, enfermedades infecciosas, enfermedades psiquiátricas, daño cognitivo y cáncer.
Se estima que en la Argentina más de 8000 personas mueren cada año por enfermedades vinculadas al consumo problemático de alcohol.
Según la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP) se trata de una droga de gran capacidad adictiva cuyo abuso genera importantes problemas sociales y de salud. Sin embargo, su consumo goza de una tolerancia social muy elevada tanto entre los adultos como entre los adolescentes y jóvenes y está muy extendido en todas las edades.
De acuerdo con datos aportados por SEDRONAR el alcohol es la sustancia psicoactiva más consumida por estudiantes de secundaria en todo el país
Casi no hay diferencias en los patrones de consumo de alcohol entre varones y mujeres tal como se observaba en el pasado. Esto muestra que la brecha entre sexos tiende a reducirse y marca un crecimiento del problema entre las adolescentes.
Por su parte, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda la abstinencia completa de alcohol en menores de 18 años, debido a que el riesgo de dependencia en la edad adulta puede disminuir cuanto más tarde sea la incorporación del joven al consumo de bebidas alcohólicas.
El problema del consumo de bebidas alcohólicas en las/los adolescentes es tan grave que según la OMS: “una de cada cinco muertes de jóvenes está relacionada con el alcohol”.