Según un informe de la Universidad Católica Argentina (UCA) sobre la situación de la infancia, 1 de cada 3 (33 %) chicos argentinos se alimenta en comedores escolares o comunitarios.
El trabajo indica que el acceso a la alimentación afecta al 17,5% de la población y el 8% presenta un déficit severo. Esto significa que casi uno de cada cinco chicos redujo su dieta de alimentos en los últimos 12 meses por problemas económicos y el 8% dijo haber pasado hambre. Los hijos de trabajadores marginales, los que viven en barrios pobres y en villas o asentamientos son los que mayor riesgo alimentario sufrieron.
Si se compara la primera medición que hizo la UCA en 2010, con esta última, el resultado es que tenemos una estructura social empobrecida, que se nota en todos los indicadores. Las políticas de los gobiernos que hemos tenido en este período alcanzaron para mantener la indigencia y la inseguridad alimentaria por debajo del 10%, pero no lograron reducir la inequidad social en la infancia, sobre todo en salud y educación. Los dos derechos que el Estado argentino históricamente se jactó de garantizar, salud y educación, explica el informe, no alcanzan de forma equitativa a todos los chicos, 2 de cada 10 no se hicieron ningún control médico durante el último año, mientras que cuatro de cada diez abandonan tempranamente el sistema educativo.
Hoy el 50% de los chicos argentinos solo accede al sistema de salud a través de hospitales públicos. Además, 4 de cada 10 no hicieron una consulta odontológica entre los cuatro y los 17 años. La desigualdad social se profundiza a medida que avanza la edad. La primera infancia es la que más controles médicos recibe, pero después de los cuatro años e incluso en la adolescencia se abandonan los chequeos.
En la Provincia de Santa Fe
Jorge Alvarez ministro de Desarrollo Social de la provincia de Santa Fe, aseguró que existe un creciente aumento de la demanda alimentaria, que sumado a la inflación en el mismo período recrudece la situación social en la provincia.
“Es imperiosa la firma de un nuevo convenio para Seguridad Alimentaria, con los pies sobre la tierra, ya que los importes transferidos por el Gobierno Nacional no aumentan desde el mes de Junio de 2016. Solo los índices oficiales de inflación ascienden al 60% en tal período, a lo que debe sumarse mayor demanda. Paralelamente es necesario firmar convenios referidos al fomento, fortalecimiento, equipamiento de los actores y espacios de la economía social que se encuentran imposibilitados de acceder al mercado laboral formal, entre otros”, sentenció el funcionario.
Para el Movimiento “Los Sin Techo” de Santa Fe, los datos sociales del informe dado a conocer por la UCA, son reales, son serios y que consolidan los datos que tiene el Movimiento acerca de la situación socioeconómica en los distintos barrios de la ciudad de Santa Fe y del área metropolitana.
