A partir del lunes próximo terminaran de ingresar los más de 600 niños y niñas que llegarán por primera vez a las salas de los Jardines Municipales y que, sumados a los que ya asistían en años anteriores, completarán una matrícula total de 1.434 en el ciclo lectivo 2021.
Desde el Municipio Santafesino se enfatiza que en el contexto de la emergencia sanitaria, organizar el sistema escolar para las primeras infancias fue un enorme desafío. Esa complejidad llevó a la construcción de protocolos y de un trabajo en equipo para comunicar a las familias las características de las nuevas formas de funcionamiento. Desde mediados 2020 el equipo interdisciplinario y las directoras zonales se abocaron a la construcción de una nueva organización basada en los nuevos parámetros para el cuidado de la salud con las consecuentes modificaciones de asistencia, horarios, procesos de adaptación de niñas y niños, modalidades de trabajo y propuestas pedagógicas.
El primer objetivo en este contexto de pandemia fue el de sostener el vínculo con las familias. Para esto se tendieron lazos que permitieron escuchar sus inquietudes, situaciones particulares y asistir tanto en sus necesidades de alimento, pañales y otros elementos, como con propuestas pedagógico-culturales para las familias.
Dentro de las acciones desarrolladas, se decidió incorporar salas que inicialmente no estaban designadas para el uso diario de niños y niñas, adaptándolas para su utilización como espacio transitorio.
También el periodo de adaptación al jardín tuvo que ser replanteado, ya que se trata de una etapa fundamental para los más pequeños en su ingreso al jardín. Este proceso fue especialmente atendido para que las niñas y los niños reciban el acompañamiento necesario y lo concreten sin inconvenientes. También las familias fueron oportunamente acompañadas, brindando el espacio requerido para plantear sus emociones, preocupaciones y situaciones particulares.
A esto se agrega un trabajo minucioso realizado para resolver la ausencia de una parte del plantel docente que se encontraba en uso de su correspondiente licencia por ser padres a cargo en sus hogares o personas en situación de riesgo por cuestiones de salud. Esta situación también impactó en el servicio y el municipio decidió la generación de reemplazos para que las docentes fueran eximidas y esto no afectara el periodo de adaptación de niñas y niños.
Huaira Basaber, Subsecretaria de Gestión Cultural y Educativa, se refirió a la tarea que se viene realizando y sostuvo que “Hubo muchas decisiones tomadas paso a paso, para que el sistema pueda abrir las puertas a 1.400 niños y niñas. Entre ellas, el reemplazo del personal docente eximido, la sistematización de la tarea docente presencial de forma cuidada para respetar la asistencia de grupos por burbujas, entre muchos detalles que hacen al trabajo diario de un Sistema dedicado a las primeras infancias”.
