Gabriel Sanabria, el policía Sanjavierino ferozmente baleado en la ciudad de Rosario durante un procedimiento el pasado 26 de mayo, sufrió un marcado deterioro en su estado de salud durante las últimas horas. De acuerdo al último parte médico de esta mañana, su estado es muy delicado y la situación tan dinámica, que no permite mayor planificación, aunque no descartan nuevas intervenciones quirúrgicas.
Familiares y amigos, realizan en el día de hoy una manifestación en su apoyo en la puerta del Hospital de Emergencias Clemente Álvarez de la ciudad de Rosario , donde ingresó derivado tras el ataque.
El subdirector del HECA, Germán Camiletti manifestó hoy que “Es imposible decir qué vamos a tener que hacer mañana o en horas”, y agregó que la situación es “muy compleja” y que Sanabria nunca logró salir del estado de gravedad: sigue con respirador y altas dosis de medicación.
“La lesión que recibió fue muy grave y eso es lo que determina cómo va a ser su evolución”, sostuvo. Explicó que hace unos tres días se le practicó una cirugía llamada “toilette”, para eliminar focos infecciosos y que se le podría practicar otra.
Hoy en la ciudad de rosario familiares, amigos y policías de la Motorizada donde prestaba servicio Sanabria, se congregaron en la puerta del HECA para manifestar apoyo. La emoción del padre y el hermano del policía, Fabián y Vicente, mostraron su agradecimiento por el respaldo y reconocieron sentirse “apabullados” por la situación, y concluyeron que “Hay que seguir rezando por Gabriel, nos da muchísima fuerza”, dijo el papá. “El Gabi va a salir”, afirmó, convencido su hermano.