Informan desde el Ministerio Público de la Acusación, MPA, que en el resonante caso del copamiento de la Sub Comisaría Nº 20 de la localidad de Arroyo Leyes, se procedió a imputar este viernes 20 de enero a cuatro civiles (4) y un (1) efectivo de la Policía de la Provincia de Santa Fe. Respecto a la mujer policía, que había sido detenida, que era uno de los efectivos que estaba de guardia la noche de los sucesos, fue puesta en libertad.
La Fiscal del MPA, María Laura Urquiza, que interviene en la investigación manifestó que “Se les atribuyó su participación en el hecho, con distintos delitos. Hablamos de la toma de la Comisaría, el robo en ese lugar y en forma simultánea en una casa vecina. El delito es “robo calificado por la utilización de armas de fuego”. También la funcionaria del MPA dijo que aún continúan dos personas prófugas.
Fiscal del MPA, María Laura Urquiza
LOS HECHOS
Los ilícitos investigados fueron cometidos el jueves 24 de noviembre entre las 00:30 y la 1:10 de la madrugada en la Sub Comisaría Nº 20 ubicada en el kilómetro 14 de la Ruta Provincial Nº 1, y en una vivienda particular que está a 50 metros de la dependencia policial.
Según se indicó en una de las primeras audiencias, los acusados actuaron en conjunto para ingresar a la Sub Comisaría con armas aptas para efectuar disparos. En el lugar se hicieron con armas reglamentarias, cargadores, un chaleco balístico, una escopeta, las llaves de la dependencia, celulares y un móvil policial.
El robo a la vivienda particular ubicada a metros de la dependencia, se produjo de la siguiente manera: fueron al menos seis las personas que ingresaron a la vivienda particular y golpearon de forma violenta a las víctimas, al mismo tiempo que les exigieron la entrega de dinero.
Al respecto, se indicó que “se apoderaron del automóvil de la familia, de seis mil pesos en efectivo y de diversos elementos personales”. Algunos de los imputados volvieron a la dependencia policial y desde allí se dieron a la fuga en el patrullero y en el auto particular de la familia asaltada.
En su huida se tirotearon con la Policía, luego dejaron los vehículos abandonados en la zona del bañado, donde uno de los delincuentes murió ahogado.
