En medio de las inhumanas medidas económicas ejecutadas por el Gobierno Nacional, el sistema de transporte de pasajeros en la Provincia de Santa Fe se encuentra al borde de una crisis que amenaza con afectar a los usuarios, incluidos, obviamente, los residentes de la Costa Santafesina. Se habla de restricciones, llevando al mínimo las frecuencias de los servicios y la amenaza de un paro de actividades por parte de los choferes.
La situación se agrava con el reciente aumento del 27% en el precio de los combustibles, que entró en vigencia el pasado miércoles. A esto se suma la ausencia de envío de subsidios desde el Gobierno Nacional a las provincias del interior del país.
Desde la Secretaría de Transporte Provincial, Renata Ghilotti, ha emitido declaraciones a la prensa advirtiendo sobre la gravedad de la situación. Ghilotti destacó que el sistema de transporte arrastra una crisis estructural durante muchos años, y la administración anterior contribuyó al problema con atrasos tarifarios, una flota envejecida y la falta de incentivos para que las empresas invirtieran en tecnología y mejoraran el sistema.
“Estamos en una situación compleja porque hay que pagar salarios y estamos esperando información del gobierno nacional de qué va a suceder con los subsidios”, señaló Ghilotti. Al asumir el cargo, la Secretaría de Transporte tomó medidas inmediatas para abordar la situación desesperante y pagando subsidios atrasados.
En relación con los choferes, la Unión Tranviaria Automotor (UTA) emitió un comunicado de prensa en el que, sin expresarlo explícitamente, advierte sobre la crítica situación de los trabajadores y su incertidumbre. En el corto plazo, de no encontrar una solución, se podrían tomar medidas de fuerza.
COMUNICADO DE UTA
La incertidumbre actual en el contexto inflacionario agrega presión al corazón del sistema de transporte urbano y de media distancia, las autoridades provinciales esperan información del Gobierno Nacional sobre la liquidación de los subsidios para el transporte del interior del país. La población, especialmente los residentes de la Costa Santafesina, sigue de cerca estos desarrollos, conscientes de los posibles impactos en su movilidad cotidiana.