Informa el representante del Gobierno de la Provincia de Santa Fe en el Túnel Subfluvial, Lisandro Villar, que se inició un proceso de obras muy esperadas y pedidas por los gobernadores de Santa Fe y Entre Ríos. Se trata de la repavimentación de la rampa de acceso al viaducto en Entre Ríos y de las mejoras en el sector de banquinas de la traza en Santa Fe. La inversión asciende a $ 206.969.181,41 y se realiza en el marco del plan de obras, puesta en valor y modernización del organismo biprovincial. Se anticipó en ningún momento será necesario interrumpir la circulación.
Los Gobernadores de Santa Fe y Entre Ríos, Maximiliano Pullaro y Rogelio Frigerio, han puesto como prioridad en sus gestiones los trabajos de reparación y modernización del Túnel Subfluvial, con el objetivo de mejorar la seguridad y optimizar esta importante vía de conexión entre ambas provincias. Esta arteria es crucial no solo para el tránsito local, sino también para el flujo de vehículos de todo el país y de naciones vecinas.
Lisandro Nelson Villar, representante del Gobierno de Santa Fe en el Túnel Sbfluvia, destacó que “El Túnel fue recibido con un déficit de 100 millones de pesos, pero ahora, gracias a una administración eficiente, se ha comenzado una obra de 207 millones con fondos propios. “Es un dato importante que demuestra el impacto de una correcta administración”, señaló, destacando el rol clave de la Subdirección de Obras Civiles del Ente en la ejecución del proyecto.
Por su parte, Eduardo López Segura explicó la situación crítica de la infraestructura del Túnel al asumir: “La carpeta de la rampa estaba destruida, con ondulaciones y baches que representaban un riesgo para los usuarios. Intentamos solucionarlo de inmediato, pero el túnel estaba desfinanciado, lo que solo permitió un trabajo de nivelación temporal”.
DETALLES TÉCNICOS DE LA OBRA
El Subdirector de Obras Civiles del Ente, Sergio Espinosa, explicó que el proyecto contempla una reconstrucción integral de un tramo de 200 metros de largo por 7,5 metros de ancho, en respuesta al deterioro por problemas técnicos. La intervención incluye la fresado completo del pavimento y el uso de nuevos materiales, además de mejoras tecnológicas en el sistema de drenaje, fundamental para combatir el ataque de agua subterránea que afecta las rampas.
A pesar de la magnitud de la obra, Espinosa aseguró que no se interrumpirá el tránsito, gracias a una planificación cuidadosa y a los esfuerzos coordinados para garantizar la seguridad del viaducto.