En la mañana se produjo un siniestro vial que complicó aún más el ya congestionado tránsito en la Ruta Nacional Nº 168, una de las vías más transitadas por los residentes de la Costa Santafesina. Un automóvil impactó contra la baranda del puente aliviador, a la altura de la Bajada Distéfano, en el sentido hacia Paraná. El incidente no dejó víctimas fatales, pero sí generó importantes demoras debido a la reducción de un carril en la zona afectada.
Las autoridades viales informaron que la colisión se habría producido por una combinación de exceso de velocidad y pérdida de control del vehículo, factores que, junto con el alto flujo vehicular en horarios pico, suelen provocar accidentes en esta arteria clave para la conexión regional.
LA RUTA 168: UN EMBUDO CRÍTICO EN HORARIOS PICO
La Ruta Nacional Nº 168, que une la ciudad de Santa Fe con la región de la Costa y Paraná, enfrenta diariamente un tránsito saturado, especialmente en horarios laborales. Miles de personas que residen en Colastiné Norte, San José del Rincón y Arroyo Leyes utilizan esta vía como su principal acceso, generando embotellamientos y riesgos adicionales en una infraestructura que no logra adaptarse a la creciente demanda.
El incidente de hoy no es aislado. La imprudencia al volante, el exceso de velocidad y la falta de respeto por las normas de tránsito se suman a una deficiencia estructural que pone en peligro a los conductores.
REFLEXIÓN SOBRE LA SEGURIDAD VIAL
Este siniestro debería servir como un llamado de atención para conductores y autoridades. Por un lado, es imprescindible que quienes transitan por la Ruta 168 adopten una actitud más responsable, por otro lado, la situación requiere una intervención urgente de los organismos competentes.
La Ruta 168 es mucho más que un corredor vial: es el hilo que conecta comunidades y vidas. Cada accidente, cada embotellamiento, es una señal de que algo debe cambiar. La seguridad vial no es solo responsabilidad de las autoridades, sino de todos los que transitan por esta vía. Con acciones coordinadas y una actitud más prudente, es posible reducir los riesgos y evitar nuevas tragedias y demoras en el traslado.
